La dieta puede ayudar e inicialmente no hay ninguna contraindicación, siempre y cuando usted sea una persona sana y sin antecedentes de importancia. Si empieza a presentar intolerancia a la dieta, es decir, síntomas como mareos, dolores e cabeza, náuseas, vómito, es preferible suspender y consultar a su médico para evaluar las opciones que se tienen para alcanzar el peso adecuado.