Buena alimentación y ejercicio, esa es la mejor recomendación. Una dieta con desayuno adecuado, un almuerzo moderado, una cena más pequeña, aumento del consumo de agua. Suspenda gaseosas y bebidas procesadas. Haga la mejor elección de alimentos dentro de las posibilidades y defina su rutina de alimentación como un estilo de vida, no como una dieta. Los medicamentos milagrosos, no son adecuados.