El hecho de que te llenes fácilmente puede ser porque de hecho comes muy poco. En primer lugar, debes hacer el intento de comer un poco más. Tal vez, no es pertinente que aumentes de la nada las cantidades de alimentos, pero sería ideal que empieces a comer algo con mayor frecuencia. Esto ayudará a que no te sientas tan llena pero que aumentes la cantidad de comida que consumes al día.
Otro punto que debes tener en cuenta es abandonar el cigarrillo. Esto es una de las cosas más difíciles que he notado, pero muchos pacientes cuando encuentran la voluntad de hacerlo, logran dejar este hábito y suben de peso. El cigarrillo por lo general disminuye la ansiedad y por tanto el apetito y hace que las personas poco a poco vayan disminuyendo de peso, se chupen y se vean incluso mas viejos de lo que realmente son.
Debes recuperarte de tu situación emocional. Si bien, puede que consideres que es un asunto superado, probablemente no lo hayas resuelto del todo. En este tipo de situaciones, el apoyo de un amigo, un familiar o un psicólogo te podría ayudar a encontrar la paz mental que necesitas para recuperarte del todo en cuerpo y en mente para lograr tu objetivo, que es subir de peso.
Finalmente y, como recomendación supremamente importante, lo ideal es que inicies actividad física orientada. ¿Por qué? Porque no se trata solamente de aumentar la cantidad de alimentos que ingieres al día, sino transformar esos alimentos en músculo y aumentar en masa muscular y no en grasa, que podría a futuro ser contraproducente para tu salud. Por tanto, lo ideal es que buscases un gimnasio que cuente con médicos deportólogos y entrenadores profesionales para que te orienten y apoyen en el proceso de aumento de peso y no vayas a alterar tu metabolismo, ni exceder tus capacidades.