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Hay diferentes teorías para explicar el dolor articular con el clima frío y la variación de temperatura. Se plantea que el lubricante que se encuentra en las rodillas conocido como cartílago con el frió se vuelve más espeso como un gel cuando se congela, pierde su función momentáneamente dificultando el movimiento y generando dolor a los mismos. La otra explicación tiene que ver con que las rodillas tienen receptores para detectar la presión debido a que soportan la mayoría del peso corporal estos se pueden ver alterados con los cambios bruscos de temperatura generando nuevamente el dolor. Esto se puede evitar teniendo una dieta rica en colágeno, como el que se encuentra en las gelatinas o en las patas de pollo o pescuezos o bien en suplementos alimenticios con colágeno o glucosamina. Espero que esta información le sea útil quedando a su disposición por si tiene más dudas.
