Es fundamental mantener una dieta balanceada y comer por horarios. Evita el consumo de grasas, dulces y harinas y aumenta el consumo de frutas, verduras y proteínas, así como la ingesta de agua para mantenerte hidratada y ayudar a acelerar tu metabolismo. La dieta debe ir acompañada de actividad física de por lo menos 120 minutos por semana. Para enfatizar la zona del abdomen puedes iniciar con ejercicios cardiovasculares (correr, montar bicicleta, saltar lazo, patinar, entre otros) para quemar excesos de grasa y continuar con ejercicios de tonificación (abdominales, oblicuos, entre otros) para los cuales puedes utilizar un poco de peso. Te recomiendo asesorarte con un nutricionista y un deportólogo para que te brinden un mejor enfoque en dieta y rutina de ejercicios teniendo en cuenta tus objetivos.