Lo importante a tener en cuenta es: en primer lugar el grado en el que se encuentre la anemia en el momento de la cirugía porque si es leve no debería haber tanto riesgo y, también depende del tipo de cirugía que te vayas a realizar porque en algunas la pérdida de sangre es mínima. Además es importante realizarla en una entidad de salud confiable donde haya personal de salud calificado y las condiciones de higiene requeridas. De igual forma el especialista debe pedir previo al procedimiento los exámenes que considere necesarios dentro de éstos el hemograma y tomar la mejor decisión en tu caso definiendo si hay o no anemia y si es un riesgo para tu vida o no con el procedimiento, aclarando todas tus dudas.