El Cannabis o Marihuana cuenta con aprobación de uso, de manera medicinal, en enfermedades muy particulares y pacientes concretos en quienes ha fallado el tratamiento estándar para sus diferentes dolencias.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) resume que dichas autorizaciones de uso son principalmente en enfermedades neurológicas tales como Esclerosis múltiple (Degeneración de sustancia blanca), dolor neuropático (Inflamación de los nervios), trastorno del sueño en enfermedad de Alzheimer, Epilepsia, enfermedad de Parkinson, entre otras.
Lastimosamente los estudios llevados a cabo en estas enfermedades no suelen ser aportar resultados sólidos para generalizar el uso del cannabis con fines médicos a toda la población, motivo por el cual su uso se limita a un subgrupo específico de personas con indicaciones muy estrictas, con el fin de agotar todas las opciones de tratamiento.