Este es un proceso de cambio de hábitos alimenticios, son cambios que toman tiempo y requieren de paciencia por parte de los padres. Recuerde usar técnicas como ofrecerle una recompensa como salir a pasear o jugar. También puede decirle que se mantenga sentada en la mesa hasta que coma. Debe cumplir con los premios o penalizaciones que imponga, nunca imponga castigos físicos. También puede comentar el caso con su médico tratante o con nutrición, para poder crear una dieta que le permita acostumbrarse progresivamente a los alimentos que no desea consumir.