Para la diarrea se utiliza una dieta progresiva, ya que la introducción de los alimentos se realiza paulatinamente. Con ello se consigue que el tracto digestivo se encuentre en reposo al principio y se vaya acostumbrando poco a poco a volver a realizar sus funciones habituales, perdidas durante la enfermedad. Una
parte fundamental de la alimentación en la diarrea, es la reposición del agua, la glucosa y los electrolitos que se pierden a causa de las deposiciones líquidas y frecuentes. debes evitar alimentos que contengan lácteos, así como guisos, fritos, embutidos y salados, café porque irritan la mucosa digestiva.