Para prevenir el desgaste articular es recomendable la realización de ejercicios que fortalezcan los músculos que estabilizan la rodilla como los del muslo, evitar la sobrecarga de peso, realizar estiramientos antes y después de la actividad física, mantener una adecuada hidratación y una alimentación balanceada.
En caso de percibir molestias o lesiones suspender la actividad y asistir a control médico.