La alimentación vegetariana no produce problemas cerebrales, de hecho muchas de las comunidades nativas más sanas no consumen proteínas de origen animal. Sin embargo si es una mujer que ha consumido carne por muchos años y desea cambiar su dieta a vegetariana debe hacerlo con ayuda profesional de un nutriólogo o nutricionista, pues es muy común deficiencias por falla en el reemplazo no sólo de las proteínas sino de otros componentes que tienen los alimentos de origen animal.