Lo recomendable es que usted sea valorado inicialmente por un ortopedista, para que éste especialista determine la severidad de la lesión, si es necesario cirugía o no y de acuerdo a ello determinar si usted es apto o no para desempeñar su labor. De ésta forma ya con el concepto de un médico puede hacerse de forma adecuadael cambio de puesto.