No hay una contraindicación para hacerlo, pero al ser diabético la cicatrización de las heridas no se da de manera fácil y esto puede llevar a infecciones de las mismas. Conociendo este riesgo, si usted igualmente quiere hacerlo puede hacerlo. Lo único es que se lo haga en un sitio reconocido y siga las recomendaciones de su tatuador.