Existen diferentes enfermedades desmielinizantes. Desafortunadamente, la gran mayoría no tienen ningún tipo de cura, aunque si un tratamiento que puede prolongar la calidad de vida de las personas por mucho tiempo. Dependiendo de la enfermedad, existen diferentes pronósticos y diferentes síntomas que lo pueden afectar. En todo caso, se debe tener un seguimiento estricto por parte de neurología.