Es posible que esta hiperlaxitud pueda ser generada en parte por desgaste. Para evitar el daño debe poner especial atención en el calentamiento previo al ejercicio así como el estiramiento posterior.
Puede cambiar algunos días de trote por otra actividad con menor impacto sobre las articulaciones, como una elíptica. Si no hay dolor siga estas recomendaciones para evitar algún tipo de daño articular sin suspender su actividad física.