1) Puede estar durmiendo con la boca abierta y eso causar la resequedad.
2) Puede estar teniendo -eventualmente- problemas de reflujo y por eso el sabor amargo y la resequedad.
3) Puede -eventualmente- tener un caso de gingivitis con sangrado de las encías por la noche y eso al amanecer darle un sabor metálico en la boca.