Algunas pacientes que usan la Mesigyna han reportado los siguientes síntomas gastrointestinales: diarrea, vómitos, náuseas y dolor abdominal. Si usted ha presentado estos síntomas en parte se podrían atribuir al uso de la inyección, pero también se tendrían que descartar otras potenciales causas de los mismos síntomas.
El que la deje o no depende de su decisión y de la orientación que un profesional le pueda dar al respecto, como por ejemplo yo que le estoy orientando ahora. En lo personal siempre les explico a las pacientes que planifican que llegar al método ideal para cada una es un proceso de prueba y error hasta dar con el mejor método. Entonces igualmente le digo lo mismo: se puede intentar cambiar por otro método y ver cómo le va con el nuevo si usted decide hacerlo bajo la guía de un profesional que le diga los pro y los contra.
Ahora mismo le diría, no lo cambie. Primero trate de ver si algo más puede ser la causa de los síntomas además de la inyección y trate de controlarlos, si luego de esto definitivamente se nota que la inyección es la culpable con mayor peso entonces sí con razones más claras cambie de método si lo desea.