Los síntomas que se refieren pueden estar relacionados a múltiples causas como contracturas musculares, desgaste articular, inflamación de la articulación, entre otras. Se puede manejar en casa con analgésicos de venta libre, si no hay contraindicaciones, y con medios físicos con calor y frío. Si el dolor es repetitivo o limitante, consultar al médico tratante.