El ejercicio aerobio y anaerobio durante el día, ya sea realizado en horas de la mañana o de la noche, permite la regulación del metabolismo del cuerpo, libera sustancias que permiten un buen funcionamiento cognitivo, se eliminan toxinas y da la estabilidad en el sueño nocturno. Se debe realizar ejercicio aerobio 30 minutos al día acompañado de ejercicios de fuerza iniciando con bajo peso.