Las zonas más periféricas del cuerpo son sensibles a cambios de temperatura bruscos, es decir, se pueden tornar calientes o fríos, se habla de zonas del cuerpo como la nariz, las orejas, los dedos de las manos y los pies, al ser las zonas más periféricas del cuerpo, los vasos sanguíneos son muy susceptibles de cambios que afecten la temperatura (vasoconstricción = se ponen fríos, vasodilatación = se ponen calientes y rojos), en principio puede ser un efecto vasogénico de los pies, en respuesta a la temperatura ambiental, por ejemplo, en otras ocasiones pueden indicar enfermedades como Raynaud y otras, son más raros estos últimos casos pero posibles.