Es importante tener buenos hábitos de sueño. Estos son: acostarse todas las noches a la misma hora, apagar todas las luces y sonidos cuando se está disponiendo para dormir, evitar consumo de bebidas negras, cafeína o alcohol, solo usar la cama para dormir (no comer, ver televisión o leer sobre ella). Si pasan 10-15 minutos y no se ha podido quedar dormido, se debe levantar, hacer alguna otra actividad afuera de la habitación y volver a la cama solo cuando se esté preparado para dormir. De esta forma se puede recuperar el sueño.