Mejorar la higiene del sueño, es decir, suspender toda las bebidas negras como café, té, chocolate, sodas negras, etc. Acostarse siempre a la misma hora, que no hayan distractores en la alcoba como computadores, TV, celulares, radios, etc. Si se puede, hacer una pequeña caminata unas dos horas antes de dormir y tomar una cena suave. Tener un rato amable y tranquilo con la familia antes de irse a la cama.