A los 16 meses los parámetros que se usan para evaluar el desarrollo del lenguaje son: Decir una palabra (objetos familiares), comprender órdenes sencillas, ya a los 18 meses decir 10 palabras (promedio), nombrar imágenes, identifica una o más partes del cuerpo; lo que quiere decir que sí es normal que aún balbucee. Recordar que cada niño tiene un ritmo diferente de desarrollo y esto se modifica según la estimulación que tenga el niño. Hablarle siempre claro, con la pronunciación correcta de las palabras para que desde el inicio el niño se acostumbre a decirlas adecuadamente.