La automedicación en estos casos no siempre resulta adecuada, es importante visitar al ginecólogo para que se solicite un frotis y un cultivo vaginal. Mientras no se sepa qué tipo de microorganismo se encuentra en el tracto genitourinario no se puede saber como tratarlo. Se recomienda hacer baños de vinagre blanco en las noches, mezclar una cucharada de agua oxigenada en medio vaso con agua introducir en la vagina en las noches, tomar al menos tres gramos diarios de vitamina C por 1000 miligramos, pero ante todo visitar al ginecólogo.