Es importante saber cuándo fue la cesárea, si se está lactando o no y los requerimientos nutricionales. Lo más recomendable es que se consulte al médico tratante para realizar un examen físico adecuado y una historia clínica completa. Por el momento, mantener una dieta balanceada, aumentar el consumo de frutas, verduras, agua, evitar las grasas, gaseosas y las harinas en exceso.