Después de una Hemorroidectomía (cirugía de Hemorroides) se deben tomar los analgésicos y antiinflamatorios ordenados por el cirujano; se puede esperar con la primera defecación un sangrado escaso y esto es normal. Es importante que durante unos días después de la cirugía, se beban abundantes líquidos y comer una dieta blanda (arroz blanco, plátanos, pan tostado o galletas, puré de manzana). Luego, se puede volver a alimentarse de manera regular y gradualmente aumentar la cantidad de fibra en la dieta. Aplicar hielo en la zona anal puede reducir la inflamación y el dolor, acompañado de baños de asiento (sentarse en una taza de agua caliente por 15 minutos). Seguir estas recomendaciones y las dadas por el médico tratante.