La causa más frecuente es la falta de fibra adecuada en la dieta y la falta de buena hidratación (agua). También influye el sedentarismo (falta de actividad física). En general aumentar el consumo de vegetales, en especial las hojas verdes, ayudará de forma importante con el movimiento intestinal; frutas como la papaya, el mango maduro, la pitaya también ayudan. La regularidad en las comidas y el exceso de proteína también se relaciona con la constipación por lo que una dieta balanceada es vital.