Uno de los efectos adversos más comunes de estos medicamentos son los relacionados con somnolencia y alteración del estado de alerta por lo que puede estar relacionado. Para corregir esta situación además puede que sea necesario tener unos hábitos adecuados de higiene del sueño. Entre las recomendaciones más comunes están:
- Establecer un horario de sueño regular o rutina del sueño.
- No permanecer más de 20 minutos en la cama si no puedes dormir.
- Dormir cuento tiempo creas que es necesario para despertarte sintiéndote bien, pero no más.
- Reservar la cama solo para dormir y no para actividades de trabajo, comida, sexo, TV, entre otros.
- Evitar actividades mental y físicamente desafiantes antes de dormir como estudiar o hacer ejercicio.
- Evitar fumar o tomar café de 4 a 6 horas antes de acostarte.
- Mantener una habitación que te resulte cómoda, en orden, temperatura y luz adecuada y lo que consideres según tu gusto.
- Mantener la habitación totalmente oscura a la hora de acostarse.
- Evitar estar cerca de elementos distractores como teléfono, TV, computadora y otros al momento de acostarse.
- Evitar alimentos ricos en grasas o carnes durante la noche.
- Usar colchones y almohadas con las que se sienta cómoda.
- Evitar el ejercicio durante la noche.
- Evitar las actividades mentales exigentes al menos 02 horas antes de acostarse.
- Evitar las siestas.
- Evitar la automedicación.
Si a pesar de esto persiste y empieza a alterar tu trabajo o vida social lo adecuado es que acudas a tu médico. Espero te resulte útil.