No lo deje estar en computador o televisión en las noches, póngale música suave una media hora antes de lo que usted pretenda que es la hora que debe dormirse. Trate que las actividades de la noche no sean estimulantes, es decir, de juegos con balón. Bajen la voz, bajen la luz. Abrazarlo, contarle cuentos tranquilos mientras lo consiente puede tranquilizarlo e inducirle el sueño. No le de dulces ni gaseosas ya que le producen gran hiperactividad y nerviosismo. No hay nada que no logre el amor, la ternura, el abrazo, el canto suave.