El tratamiento más allá del farmacológico requiere un enfoque multidisciplinario que incluye:
- Educar para que intente defecar sentandolo 5-10 minutos en el retrete, de 2 a 3 veces al día, preferiblemente tras comer aprovechando el reflejo gastrocólico.
- Recompensar que el niño se esfuerce por lo lograrlo aún y cuando no sea exitoso.
- Consumir fibras alimentarias por medio de una dieta balanceada que incluya frutas, verduras y cereales. Esto debe incluir 0.5 g/kg de fibra . Lo cual será eficaz una vez ha sido restaurado el tono muscular del colon y del recto.
- Aumentar la cantidad de agua ingerida diariamente.
- Evitar baños donde exista poca confianza (colegio, gimnasio, etc.).
- No administrar suplementos o fibras comerciales purificadas
- El uso de una mezcla de probióticos una vez conseguida la desimpactación fecal podría también tener efectos beneficiosos.
No se recomienda la automedicación con laxantes sin antes verificar por medio de una valoración clínica que no exista impactación fecal, es decir, una masa fecal grande y dura, con recto dilatado y lleno de materia fecal dura y seca. En este caso es necesario que el médico indique la realización de la desimpactación por vía rectal con solución salina, solución de fosfatos, soluciones jabonosas, solución de leche de melaza, aceite mineral con sorbitol o supositorios de glicerina; o, en su defecto, terapia oral con polietilenglicol a dosis adecuada para su peso.
Si ya van varios días que no puede evacuar y esto está causando molestias o irritación a tu hijo deberás llevar al médico pronto. Espero te resulte útil. No olvides calificarnos.