Estos síntomas no son específicos, es decir no hablan de una sola enfermedad porque puede aparecer en varias.
Algunas posibles causas pueden incluir: bajones de azúcar (hipoglicemia), malestar general por enfermedades virales como el resfriado común, fatiga física o mental, ansiedad, entre otras causas.
Si los síntomas persisten y se acompañan de otras condiciones como tos o diarrea, es posible que se trate de algo viral, en este caso mantener reposo y una buena hidratación contribuirá a la mejoría de los síntomas.
Cuando estos son causados por hipoglicemia, se solucionan ingiriendo carbohidratos de rápida absorción (dulce, jugo de caja), manteniendo una dieta balanceada evitando el exceso de azúcar ayudará a prevenirlo.
Si las molestias aparecen de forma episódica (breves momentos en múltiples ocasiones) de forma constante, lo mejor sí sería una valoración médica presencial, quizás se indiquen mayores estudios a nivel de la función de glándulas como la tiroides, la suprarrenal, entre otras.