Puedes hacerlo, sin embargo debes tener en cuanta que hay una gran posibilidad de que haya algo de intolerancia los primeros días, que no te la reciba bien, tenga distensión abdominal, las deposiciones cambien sus características etc.
Lo ideal sería que no hagas una transición tan abrupta, sino que hagas el cambio poco a poco. Las vayas mezclando hasta cambiar totalmente una y otra.
Sería óptimo si puedes consultar previamente con tu médico general o pediatra para ver que leche escogiste y que te asesore de forma puntual como realizar el cambio.
Espero esta información sea la adecuada, no pool vides calificar nuestras respuestas.