Esto no representa una anormalidad, puede estar en relación con variaciones de la temperatura ambiental.
Puede calentar sus pies con baños de agua tibia, secándolos bien, usando medias y abrigarlos con una cobija.
No debe alarmarse esto no representa por sí solo una anormalidad y aparenta una respuesta o reacción normal del cuerpo ante condiciones ambientales.