Cuando se inicia un tratamiento para manejar los parásitos, es importante que se acompañe de una dieta balanceada, baja en grasas, comidas rápidas, salsas, embutidos, comidas empaquetadas, sodas, refrescos. Se debe mantener una dieta lo más balanceada posible (idealmente siempre debe tener esta dieta), rica en frutas, verduras (bien lavadas), insistir en el lavado de manos antes de consumir alimentos, tomar agua mineral o de filtro. Continúe hasta el final, el tratamiento instaurado, es decir, espere una semana y reinicie, independientemente si "pica la panza" o no, es precisamente por esto que debe mantener una adecuada dieta.