La clave está en tener buenos hábitos para el sueño. Es decir, no dormir en horas del día o la tarde, y no realizar actividades de estudio en la cama. Reservar el horario de la noche para el sueño. Es decir que debes evitar dormir en la tarde o día, dado que esto hará que no tengas sueño a la hora que deberías dormir. Evita irte a dormir tan tarde. Adicionalmente, tratar de dejar tu alarma fuera del alcance de donde estés durmiendo, con el fin de que debas levantarte a apagar la alarma, evitando volver a la cama, de manera que esto promueva que despiertes más fácil. Esto es más cuestión de organización de tus hábitos y se fuerza de voluntad. Intenta estos consejos de manera juiciosa para mejorar esta costumbre. Espero haberte orientado. Si cuentas con otra duda, puedes comentarnos.