Esta sensación no es normal y puede ser una señal más comunmente de deprivación de sueño, es decir, de que usted no está durmiendo lo suficiente o lleva varios días o meses durmiendo poco. Haga lo posible por dormir al menos siete a ocho horas diarias cada noche, idealmente en una habitación, oscura, silenciosa, y fría, esto se recomienda para mejorar el sueño, además de alejarse de pantallas como televisores o celular en la hora previa de irse a dormir. Si estas sensaciones persisten aún después de dos semanas de sueño adecuado es recomendable que acuda al médico general para estudiar su caso en detalle.