Puedes consumir alimentos ricos en hierro como: carnes, hígado, pescado, morcilla, fríjoles, lentejas, garbanzos y también nueces, almendras y espinacas. Evitar consumirlos cercano al consumo de leche o sus derivados (queso, yogurt, etcetera), porque altera la absorción de hierro de esos alimentos mencionados anteriormente, por lo tanto debe haber dos horas de diferencia entre el consumo de leche y los alimentos ricos en hierro y viceversa. Es mejor consumir esos alimentos con jugos ácidos (si no te caen mal), porque los cítricos ayudan a absorber mejor el hierro. De igual forma es importante que continúes los tratamientos enviados por tu médico tratante y los controles de hemogramas para evaluar la respuesta de la anemia al tratamiento. Pero en caso de sangrados abundantes ya sea nasales, vaginales o por cualquier vía debes acudir por urgencias.