Es poco probable que esta lesión constituya el terreno para el crecimiento de cáncer de piel, la agresión crónica al tejido y de forma repetida puede favorecer un ambiente proinflamatorio que puede facilitar la aparición de lesiones neoplásicas. Si tiene una herida en estos momentos lave con agua y jabón, puede emplear un antiséptico tópico y evite manipularla nuevamente.
En caso de enrojecimiento, inflamación o secreción acuda a valoración médica.