Usualmente no, la esquizofrenia en una condición crónica y relacionada con un marcado deterioro de las funciones del paciente, a diferencia del trastorno bipolar que suele tener características diferenciales claras y menor compromiso de la integridad del paciente y su interacción con el entorno. No obstante, el manejo de esta puede requerir la combinación de distintos fármacos como algunos antipsicóticos, sin indicar esto la presencia de un trastorno como la esquizofrenia.