El sulfato de amonio es un detergente abrasivo que no es tóxico ni peligroso pero que puede producir alergias o pérdida de los aceites naturales que cubren el cabello. No existe contraindicación médica actualmente para el uso de productos con esta sustancia aunque se recomienda siempre optar por opciones más naturales ya que su única función dentro del shampoo es crear espuma y homogeneizar el lavado.