El dolor de cabeza puede tener muchas causas, procesos vasculares, infecciosos, por traumas, etc. Para orientar mejor la etiología es necesario conocer más detalles del dolor, en donde se ubica, si es pulsatil o como una presión, si lo asocia a otros síntomas como nausea, vomito, vértigo, molestia con la luz o el ruido, si mejora o no con analgésicos o si la despierta en la noche. Puede ampliarnos estos datos para brindarle una mejor orientación. Si el dolor de cabeza es muy intenso, no cede con los analgésicos de venta libre, tiene vomito persistente, fiebre o vértigo, si es el peor dolor de cabeza de su vida, si el dolor empeora con los días en vez de mejorar, la levanta en la noche, tiene dificultar para ver, hablar, caminar o alteraciones en la memoria, somnolencia, debilidad en músculos de la cara, brazos o piernas debe acudir al servicio de urgencias.
Por otra parte, la sudoración es un síntoma inespecífico en el que se debe indagar más para determinar que lo está causando, puede ser una respuesta fisiológica normal, por ejemplo si su habitación no cuenta con buena ventilación. Sin embargo, si está perdiendo peso, se siente muy cansada o débil, ha presentado fiebre y la sudoración es profusa y persistente debe acudir a valoración médica presencial para ampliar su historia clínica y descartar alguna patología de importancia.