La somnolencia puede ser un efecto adverso de algunos antidepresivos y la respuesta a esta es variable en cada persona, esto depende del tipo de fármaco, no obstante a bajas dosis y por largos períodos este tipo de efecto suele disminuir o tolerarse con mayor facilidad, dependiendo del fármaco.
Si ha sido diagnosticada con una depresión, dentro de los síntomas de esta pueden encontrarse alteraciones del patrón de sueño y la sensación de recuperación. Es importante igualmente que revise conductas de higiene del sueño, establezca horarios para dormir, evite el uso de dispositivos electrónicos en la cama o consumo de estimulantes previos a la hora del sueño. Si sufre de enfermedades orgánicas es recomendable que las mantenga controladas, asista igualmente a control médico con el fin de evaluar factores orgánicos relacionados que pueden incluir: anemia, hipotiroidismo, déficit nutricionales.