Haciendo uso adecuado de la medicación que se te formule y evitando la exposición a agentes físicos o químicos desencadenantes de crisis como por ejemplo el ejercicio o actividad física si tu asma se relaciona con ello o alergenos como polvos, humos, vapores, que pueden actuar como agentes irritantes o inflamantes de los bronquios. Por lo demás puedes llevar una vida completamente normal, si llevas controles periódicos, debes asistir a tus controles periódicos sin falta.