Es la oclusión progresiva de las arterias por placas de ateroma que pueden llegar a producir insuficiencia arterial crónica o bien déficit agudo de la circulación. Hay tres factores principales: disfunción del endotelio, que es la capa muscular interna de las arterias; inflamación y formación de trombos a este nivel. El tratamiento incluye cambios en los estilos de vida de la persona como evitar el consumo de alcohol y cigarrillo, cuidar las cifras de tensión arterial, disminuir el estrés y ejercicio. Existen tratamientos farmacológicos y quirúrgicos que se indicarán según sea el caso de la persona que presenta la enfermedad.