La placenta previa total es mucho más peligrosa para el embarazo que una placenta de inserción baja. Es normal que al inicio del embarazo la placenta tenga una inserción baja, sin embargo, conforme vaya avanzando el embarazo esto debería ir cambiando poco a poco hasta ocupar su posición fisiológica, por lo que la placenta previa se considera una complicación del segundo trimestre del embarazo. En caso de padecer de alguna se amerita valoración médica estrecha.