Es una posibilidad, en las neuralgias vagales, se produce dolor y parestesias en el trayecto del nervio y disfunción del mismo, este se pudo haber afectado debido a traumatismo directo al inducir el vómito o debido a la presión generada por el mismo. Entre los síntomas pueden aparecer alteraciones sensitivas o motoras de conducto auditivo externo, laringe, faringe y paladar, disfunción cardíaca, pulmonar o gastrointestinal leve, de forma rara se acompaña de neuralgia también del trigémino que complica el cuadro clínico. El diagnóstico es principalmente clínico con la realización de estudios que descarten otras patologías, es probable tambien que el cuadro de ansiedad pueda estar provocado o agravando algunos de los síntomas. La mayoría de los casos estos síntomas remiten solos en un par de semanas o a través de maniobra de Valsaba y técnicas de respiración que ayuden a estimular el nervio; otros pueden ameritar tratamiento con neuromoduladores como carbamazepina, oxcarbamazepina, gabapentina, lidocaína, fenitoína o amitriptilina indicados por un médico previa valoración. Si estos síntomas persisten debes acudir a valoración médica.