Coma una dieta balanceada y saludable y aumente la actividad física. Además de limitar las calorías, evite las dietas ricas en hidratos de carbono refinados, rápidamente digeridos. Esto incluye los alimentos que limitan como pan, sémola, arroz, papas, maíz y azúcar concentrado. Debe tener una dieta baja en grasa, evitar el alcohol, controlar adecuadamente el peso, realizar actividad física periódicamente.