Es probable que se trate de una gastroenteritis de origen viral, parasitario o infeccioso, o a una reacción a alguno de los alimentos ingeridos. Es necesario que sea valorado por un médico pediatra para determinar el origen de estos síntomas así como la realización de un coproanalisis u otros exámenes que el médico amerite necesario según su criterio para establecer el tratamiento y manejo a seguir. Recuerde no automedicar a su niño.