Depende del tipo de infección respiratoria. Si fue una infección leve de las vías respiratorias altas, como un resfriado común al cabo de 1 semana puede ejercitarse. Pero si fue en las vías respiratorias bajas, como una bronquitis o neumonía, debe aumentar la intensidad del ejercicio poco a poco y al cabo de 3-4 semanas ya debería estar totalmente recuperado.