Las causas de las alteraciones en la función tiroidea son variables y pueden ser por producción de anticuerpos contra la tiroides, uso de ciertos medicamentos, deficiencia o exceso de yodo, uso de yodo radioactivo, tumores en la hipófisis, infecciones virales, crecimiento glandular, entre otros.
No existe ningún tratamiento natural que se pueda recetar para controlar el hipo o hipertiroidismo.